¿Quién diría que el alimento del futuro está plasmado en el escudo nacional de México?
Por: Omar Porcayo
Sí, la organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) calificó a la planta mexicana del nopal como el “alimento del futuro“. Expertos de todo el mundo reunidos en la sede central del organismo en Roma, Italia, concluyeron que la cactácea ofrece una solución nutritiva y sustentable, considerando los efectos del cambio climático y su capacidad para sobrevivir en climas áridos.
“Es muy valioso, especialmente como alimento y pienso para el ganado en áreas de tierras secas”, expresaron los investigadores en un comunicado de prensa.
“Si bien la mayoría de los cactus no son comestibles, las especies del género Opuntia tienen mucho que aportar, en especial si se gestionan como cultivo en lugar de planta que crece silvestre”, agregaron.
El nopal, que ahora forma parte de la seguridad alimentaria del planeta, es elemento primordial en la alimentación de los mexicanos desde hace siglos.
Se consumen 6.4 kg per cápita, gracias a las tres millones de áreas de siembra.
Los nopales se encuentran desde el norte hasta el sur de México y alcanzan su mayor riqueza en el altiplano.
Forma parte del mito de la creación de la ciudad de Tenochtitlán. La palabra, en náhuatl, viene de la unión de “piedra” y “nopal”, es decir, “lugar del nopal que crece sobre la piedra”.
Los usos del nopal no se restringen a la alimentación, tiene aplicaciones químicas, industriales, ecológicas, medicinales y simbólicas.
Incluso se ha utilizado como generador de energía eléctrica. Y también como producto de belleza en aplicaciones como el champú.
Dados sus beneficios, agrónomos chinos han importado un gran número de especies con la intención de patentarlas en su nación.
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