Trabajadores y activistas han pedido justicia por su muerte
Sebastián Francisco Pérez, un migrante guatemalteco de 38 años, falleció un día después de su cumpleaños cuando trabajaba en la granja ‘Ernst Farms and Nursery’ de un pueblo en Oregón, Estados Unidos.
De acuerdo con The San Diego Union-Tribune, el pasado 26 de junio Pérez estaba trabajando en el vivero cuando las temperaturas alcanzaron los 37.8 grados Celsius, un récord en el noroeste de Estados Unidos.
Fueron los compañeros de trabajo de Francisco quienes lo encontraron inconsciente y pidieron ayuda de los paramédicos, pero no lograron reanimarlo y falleció.
De acuerdo con Pedro Lucas, sobrino del migrante fallecido, su tío regresó hace cuatro meses a vivir a Estados Unidos y era el soporte económico de su esposa, quien vive en Ixcan, Guatemala, un pueblo cerca de la frontera con México.
“Le gustaba estar en Estados Unidos… En Guatemala, la economía no es buena. Hay mucha pobreza, así que sales para buscar bienestar y un futuro”, afirmó su sobrino.
Reyna López, directora ejecutiva del sindicato de trabajadores agrícolas Pineros y Campesinos Unidos del Noroeste, responsabilizó a la División de Seguridad Laboral y Salud de Oregón (OSHA) por la muerte de Pérez, pues aseguró que no tomaron medidas de emergencia para hacer frente a la ola de calor.
Mientras que los compañeros de Sebastián y activistas han pedido justicia por su muerte y mejores condiciones para los trabajadores agrícolas.
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