Los migrantes, sobre todo los centroamericanos están siendo olvidados por el gobierno de los Estados Unidos en plena contingencia por el COVID-19.
De manera increíble, se ha dado a conocer la segunda muerte por COVID-19 dentro de uno de los centros de detención de migrantes en Estados Unidos, en esta ocasión ocurrió en el estado de Georgia y la persona perdió la vida la tarde del domingo.
La cancillería guatemalteca reportó el fallecimiento de su connacional, llamado Santiago Baten Oxlaj, de 39 años, mientras se encontraba bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, conocido como ICE por sus siglas en inglés, en espera de ser deportado.
Baten ingresó al centro de detención el 20 de febrero de acuerdo con la cancillería de su país, aunque el informe de ICE indica que fue aprehendido el 2 de marzo de 2020 en la ciudad de Atlanta. De acuerdo con los datos del servicio estadounidense el 26 de marzo aceptó ser deportado a Guatemala.
Su deceso fue registrado a las 5:03 horas (9:03 GMT) mientras se encontraba internado en el hospital Regional de Piedmont Columbus. Su diagnóstico como caso positivo de COVID-19 fue notificado el 28 de abril y su situación se complicó a causa de la diabetes que sufría.
Estados Unidos es el país más afectado por la pandemia de COVID-19 en el mundo, mientras que América Latina se ha convertido en uno de los epicentros de esta enfermedad, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La cifra está hasta el momento con más de un millón de contagios y está cercana a las 100 mil muertes hasata el momento.
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