El rastro de problemas en la corte de Donald Trump lo perseguirá hasta la Casa Blanca.
El presidente electo de los Estados Unidos hará una parada en un alegato legal antes de la investidura como el próximo mandatario de los Estados Unidos. Durante la primera semana de enero, Donald Trump pasaría hasta siete horas testificando por una demanda que presentó en contra del chef español José Andrés.
En 2015 el célebre cocinero desistió de gestionar un restaurante en el hotel de Trump en Washington por los ataques del entonces candidato republicano a la comunidad mexicana. En un acto de solidaridad y coherencia, los abogados del chef argumentaron que los insultos representaban un perjuicio para su negocio, pues gran parte de sus clientes son hispanos.
Trump acometió con una demanda de 10 millones de dólares por incumplimiento de contrato, mientras que Andrés reviró con una contrademanda por 8 millones de dólares por “los gastos incurridos en el desarrollo del restaurante”, así como “los beneficios perdidos y los intereses”.
Ahora la juez Jennifer A. Di Toro citó a Trump a que declare, a pesar de la solicitud de sus abogados de eximirlo de ese proceso. Será en la Torre Trump de Nueva York y la comparecencia ante los abogados de José Andrés podría extenderse hasta siete horas.
En un afán conciliador el chef asturiano le envió un mensaje la víspera convocándolo a finiquitar el proceso legal y a donar el dinero a los veteranos de guerra. Hasta el momento no ha recibido respuesta.
Mr. @realDonaldTrump can we end our lawsuits and we donate $ to a Veterans NGO to celebrate? Why keep litigating? Let's both of us win..
— José Andrés (@chefjoseandres) December 13, 2016
José de Andrés recibió recientemente la medalla de Artes y Humanidades de parte del presidente Barack Obama, quien lo definió como “una inspiración para los nuevos americanos”.
Este chef de calidad mundial es un defensor de la cultura iberoamericana. De hecho mandó a decorar las paredes de su nuevo restaurante Bazaar Mar, ubicado en el Hotel SLS Brickell de Miami, con talavera y azulejos que muestran distintas escenas alusivas a los tópicos más recurrentes de la cultura iberoamericana, según relató El Diario de España.
Mientras tanto Trump, su rival legal, pasa sus días reclutando gente para su gabinete y zanjando una montaña de demandas en proceso por distintos asuntos. El diario USA Today calculó que hay al menos 75 causas abiertas de entre 4,000 casos en las cortes en las que figura su nombre o el de sus empresas.
Ese es el próximo presidente de los Estados Unidos.