La mexicana les abrió las puertas de su casa, para que no pasaran noches con hambre y sin un techo bajo el cual dormir.
Paulina es una psicóloga de 31 años que nació en Xalapa, Veracruz, pero que desde hace 8 años aproximadamente vive en Bélgica. Allá, la mexicana ha sido testigo de la crisis humanitaria y después de ver a cientos de refugiados sufriendo en las calles decidió que necesitaba hacer algo.
La veracruzana explicó a Proceso que su labor altruista comenzó luego de ver la información que compartía la Plataforma Ciudadana de Apoyo a Refugiados en las redes sociales. Allí, ella era testigo de todo lo que la gente necesitaba, y le conmovió tanto que quiso abrirles las puertas de su casa.
Mehdi Kassou, vocero de la organización explicó que lo que ellos hacen es crear redes de personas dispuestas a darles un hogar donde vivir y apoyar con comida a los refugiados. Y para eso se coordinan mediante Facebook para acordar a cuántas personas pueden darles techo o ayudar, y por cuánto tiempo.
La plataforma ciudadana de Rivas de apoyo a los refugiados celebra una cita informativahttp://t.co/NtKSISZVaZ pic.twitter.com/5tqVnaI9Sw
— Objetivo Comunidad (@objetivocapital) October 4, 2015
El único problema era que Paulina no vivía sola, sino que compartía su hogar con otros coinquilinos, y cuando Paulina les contó sus planes no se mostraron muy entusiasmados con la idea de recibir a un completo desconocido.
Sin embargo, ella quiso buscar otra forma de ayudar y convenció a su novio belga de usar su coche como taxi para llevar a las personas sin techo del lugar en donde se encontraban hasta sus hogares temporales.
La mexicana reveló a Proceso que durante esos momentos en los que convivía con los refugiados pudo crear grandes lazos y conocer a mucho sobre otras culturas.
Finalmente convenció a sus compañeros de casa de que era seguro hospedar a un inmigrante, y unos días después conocieron a un joven de Etiopía que fue encarcelado y su padre asesinado por su activismo político.
Paulina aclaró que ahora continúa recibiendo a personas que tratan de conseguir el asilo legal en Bélgica, e incluso les ayuda a comprender y hablar mejor el idioma local para que sean capaces de explicarse bien en las audiencias.