Era padre de tres niñas y esperaba a su cuarto hijo
Caleb Wallace, un activista que encabezó una campaña en Texas en contra del uso del cubrebocas y otras medidas sanitarias, falleció por complicaciones de COVID-19.
El hombre de 30 años y padre de tres niñas, era líder del grupo ‘Defensores de la Libertad’ en San Angelo, Texas, que se oponía al cierre de negocios y otras medidas sanitarias para evitar la propagación del COVID-19.
Jessica Wallace, la esposa de Caleb, contó al diario San Angelo Standard-Times que su esposo comenzó con síntomas de COVID-19 el pasado 26 de julio, pero se negó a hacerse la prueba o ir al hospital.
Para tratar la enfermedad, Caleb tomó altas dosis de Vitamina C, Zinc e ivermectina, un un medicamento antiparásitos que los CDC han recomendado no usar para tratar el COVID-19.
Su esposa pidió donaciones para mantener a sus hijas
Debido a las complicaciones de COVID-19 Wallace fue ingresado el 30 de julio a emergencias y tuvo que ser intubado por la baja oxigenación en sus pulmones.
La esposa de Caleb creó una recaudación en GoFundMe, pues debido a su embarazo avanzado, no podía trabajar para mantener a sus pequeñas ni pagar las facturas del hospital.
Los doctores estimaban que su esposo podría estar intubado 1 o 2 semanas y la rehabilitación tardaría hasta 6 meses, sin embargo, falleció el pasado 28 de agosto.
Jessica Wallace informó su fallecimiento en la página de GoFundMe y aseguró que su esposo “era un hombre imperfecto, pero amaba a su familia y a sus hijas más que a nadie”.
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