Porque nos sentimos identificados con estos mensajes, nos vestimos con ellos.
Una chamarra con el texto “Mexico is the shit”, o una línea de ropa con puro orgullo mexicano, nos ayudan a expresar lo que pensamos, literalmente, a flor de piel. Estas prendas hablan por nosotros, y las llevamos porque el orgullo se muestra.
Somos de donde nacemos y vamos a donde queremos. Eso nadie lo cambia, aunque estemos por todo el mundo. Llevamos nuestras raíces con orgullo y alegría, y respetamos la cultura en la que nos integramos.
Nadie puede ofendernos, ni en nuestra tierra ni en otros países. Y menos si lo hace un presidente sin ética.
Orgullosamente mexicano
Los grandes conflictos hacen que nazcan grandes soluciones. Aunque nadie quiere que ocurran hechos de este tipo, hay que mirar siempre el lado bueno. En este caso, las ofensas hacia los inmigrantes, directas e indirectas, justas o insensatas, nos han impulsado a sacar lo mejor de nosotros.
Mostramos con orgullo nuestro idioma, nuestras pieles y banderas. No es tiempo de silencio y contemplaciones. Hay que levantar la mirada, como sabemos hacer muy bien, y vestirnos con nuestros mejores atuendos: la honradez, el sacrificio y la alegría de vivir.