Los agricultores del estado de Jalisco hallaron en su tierra un maravilloso tesoro que todo el mundo quiere probar.
México es reconocido a nivel mundial por sus exportaciones de bebidas y alimentos de gran calidad y sabor único, y aunque sus productos más populares son el aguacate y el tequila, ahora llegó una nueva estrella mexicana al mercado internacional: los frutos rojos de la zona de Jalisco.
Desde hace un par de décadas algunos agricultores mexicanos se habían dado cuenta de que el cultivo de fresas, zarzamoras, moras y arándanos era un negocio viable, pero nunca se había explotado tanto como se está haciendo ahora.
De acuerdo con el diario Expansión la idea de comenzar con el cultivo de frutos rojos inició luego de que Mario Steta, director general de la empresa Driscolls, que era la principal proveedora de berries a Estados Unidos, visitó el occidente de México y se dio cuenta de que el clima y la tierra eran perfectos para estas plantas.
A partir de ahí poco a poco se han ido sumando más empresas y ejidatarios que han buscado cambiar los cultivos de caña y maíz por sembradíos del ahora llamado “oro rojo”.
En el 2016 estos frutos superaron por primera vez al tequila, al vender un total de 1,800 millones de dólares en exportaciones, mientras que la bebida apenas y alcanzó 1,500 millones. Y actualmente México es el tercer país que más exporta en todo el mundo.
“Cada año crece entre 10 y 15 por ciento la superficie de berries en Jalisco. Tan sólo en la zona Valles hay un poco más de 1,000 hectáreas que en este momento se están quitando de caña de azúcar y se generan plantaciones de arándano y podríamos decir de otras regiones como Jocotepec que quitaron el maíz para plantar zarzamora o la parte de Sayula o Ciudad Guzmán”, aseguró Javier Guízar Macías, delegado de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, en Jalisco.
Y es que las características geográficas y el clima del occidente del país son ideales para que durante todo el año florezcan las plantas de los distintos frutos, haciendo que el comercio circule sin parar.
Actualmente, del total de los frutos cosechados el 90 % se envía a Estados Unidos, y el resto se comercializa con otros países de Asia y Europa siendo Reino Unido, Japón, Bélgica e Italia los más importantes.
Pero lo mejor es que los productores nacionales afirman que el negocio del oro rojo no tiene otro futuro más que seguir creciendo. Un ejemplo de esto es que a partir de 2017 se comenzaron a enviar estos alimentos hasta China, y este acuerdo comercial dará una nueva oportunidad a los agricultores.