El presidente Trump sigue dando de que hablar y si no es por sus amenazas de uso de la fuerza del Ejército, es por su accionar en la crisis social que vive EUA.
En medio de la exigencia de justicia por George Floyd, el presidente Donald Trump aseguró que sí fue al búnker de seguridad de la Casa Blanca, pero no lo hizo para protegerse de las protestas, sino para realizar una breve revisión del espacio.
En entrevista con Fox radio el presidente aseguró que la prensa reportó de forma falsa que él estaba custodiado dentro de esta área especial de protección el viernes, durante las protestas, sino que se encontraba ahí “más para una breve inspección”.
Afirmó que le comunicaron que era momento de bajar y mirar el espacio porque “tal vez algún día lo pueda necesitar”, y que sólo ha visitado el búnker “dos veces y media”.
De acuerdo con la información obtenida por CNN el presidente fue llevado al lugar con Melania y su hijo, Barron Trump, y se mantuvieron ahí por una hora. Una entrevista de Bloomberg con un miembro del personal de la dependencia indicaba que las condiciones de la Casa Blanca estaban en “rojo”, lo que significa alerta y que nadie podía salir ni ingresar de la residencia presidencial.
Durante la entrevista Trump también insistió que su visita a la iglesia para tomarse una fotografía con la biblia, ocurrida el lunes y que requirió el despeje de una protesta pacífica con gases lacrimógenos y balas de goma, fue aplaudida por los religiosos.
Su declaración no coincide con algunas de las posturas oficiales de los representantes de diversas iglesias, la tarde del martes el arzobispo de Washington, la reverenda y obispa de esta misma capital y uno de los consejeros del papa Francisco, junto con otros líderes religiosos, han criticado esta fotografía y el uso de la biblia como un adorno o parte de sus campañas.