El clima antimexicano que crece en EE. UU. no solo proviene del candidato republicano a la presidencia, se pueden encontrar incluso en reporteras de televisión.
Por: Omar Porcayo
La semana pasada dos estudiantes hispanas que se graduaron con mención honorífica en Austin, Texas, revelaron que eran indocumentadas, aunque la respuesta que obtuvieron fue muy diferente.
La mexicana Larissa Martínez dio un emotivo discurso de graduación en la McKinney Boyd High School, en el que confesó a sus compañeros que su situación migratoria es irregular. “Yo soy una de los 11 millones de inmigrantes indocumentados que viven en las sombras en los EE. UU.”.
Sus palabras detonaron una ovación de sus compañeros, que retumbó en todo el país y ganó simpatías.
La historia fue opuesta con Mayte Lara Ibarra, de la Crockett High School, quien con un tuit desató una ola de mensajes discriminatorios en contra de los estudiantes indocumentados que reciben una beca.
“4.5 de GPA, beca completa para la Universidad de Texas, 13 medallas, lindas piernas, oh y soy indocumentada”, decía el mensaje que provocó los ataques y por lo que tuvo que cerrar su red social.
Uno de los lamentables mensajes racistas provino de una presentadora de Fox Sports en Boston de nombre Emily Austen, a la que atinadamente la cadena ya sacó del aire.
“Yo ni siquiera sabía que los mexicanos eran así de inteligentes”, dijo la mujer de 27 años durante una transmisión de Barstool Sports.
Ver video, en el minuto 24.
Por si no bastaba con una afirmación tan prejuiciosa, Austen remató: “El chino siempre es el más listo de la clase en matemáticas… y el judío el más tacaño”.
“Ella no estaba hablando en nombre de Fox Sports, no respaldamos las afirmaciones que hizo en el video. Emily ha sido advertida de que sus comentarios son inaceptables, y no está programada para aparecer en ninguna transmisión próxima”, estableció Steve Tello, directivo de la cadena.
La reportera que en su perfil de Instagram, se dice amante de la comida mexicana, ofreció una disculpa por sus comentarios, aunque muy bien recibida.
“Cometí un terrible error, trataba de ser graciosa e hice una broma”, estableció en un mensaje.
Muchas de las respuestas que recibió cuestionaban si para ser graciosa tenía que ser racista, en incluso la etiquetaron con el hashtag #YoungTrump.
Lo que Austen desconocía es que la inteligencia no depende de la nacionalidad, y hay muchos mexicanos destacados en Estados Unidos por el trabajo intelectual que realizan.
Porque no se ganan dos Óscares como Mejor Director siendo un tonto, ¿o sí?
Tampoco se puede viajar al espacio.
Ni ser tesorera de los Estados Unidos.
Pero insistimos, la inteligencia no es propiedad de ninguna nacionalidad… tampoco la ignorancia.