Parece que Trump tiene un nuevo mejor amigo, el presidente de Rusia, Vladimir Putin. Nada bueno puede salir si se juntan esos dos.
Por: Omar Porcayo
Es difícil de creer, pero Donald Trump ha logrado subir el tono de sus disparates. Ahora ha pedido ayuda a hackers rusos para ganar la elección a Hillary Clinton.
“Rusia, si estás escuchando, espero que puedas encontrar los 30,000 emails (de Clinton) que están perdidos. Yo creo que nuestros periodistas estarían complacidos”, dijo en una conferencia de prensa en Florida este miércoles.
La inverosímil petición del candidato republicano parece una estrategia para agudizar su discurso extremista y polarizar las preferencias. La confrontación ha sido el arma que le ha permitido mantenerse en la carrera por la presidencia.
Cabe mencionar que también se trata de un mensaje que pone en entredicho la lealtad de Trump a los Estados Unidos y su estabilidad mental.
Este llamado de Trump al ataque cibernético a Clinton, refuerzan las versiones de que Rusia ha intervenido en el proceso electoral de los Estados Unidos. Y es que al presidente ruso, Vladimir Putin, le conviene un presidente como Trump y no como Clinton.
“No tengo nada que ver (con Putin)”, se limitó a decir Trump.
Como se ha comprobado que la mayoría de las cosas que el neoyorquino dice son mentiras, tampoco vamos a creerle en esta ocasión y nos imaginamos qué consejos aceptaría de su nuevo “best friend”, Putin.
Censura a los medios de comunicación.
Agrede a las minorías y ataca la diversidad sexual.
Menosprecia a las mujeres.
Patrocina un programa de dopaje deportivo con tal de ganar.
Admira a otros dictadores como Saddam Hussein y Kim Jong.
Deja la WWE y practica judo.
Anda por ahí sin camisa.
¡Oh no!