A este joven antiinmigrante le salió "el tiro por la culata".
Por: Omar Porcayo
Derrick McCoy de 20 años creyó que era buena idea “arrestar” a un grupo de inmigrantes indocumentados que cruzaron la frontera sur en Arizona para entregarlos a la Patrulla Fronteriza, sin embargo, “le salió el tiro por la culata”.
El estadounidense que trabaja como albañil en la ciudad fronteriza de Portal acudió el 11 de noviembre por pedido de unos vecinos a enfrentar a cuatro inmigrantes. Según su versión, McCoy sacó su pistola y le pidió a los hombres que se tiraran al suelo, asumiendo que eran indocumentados. Luego los subió a su camioneta para entregarlos a las autoridades migratorias, pero apenas había recorrido unos metros cuando fue detenido.
La versión de la Patrulla Fronteriza es diferente. Según los oficiales, detuvieron al joven que intentó ocultar que transportaba a personas. Además, los inmigrantes declararon que le ofrecieron 200 dólares por llevarlos a un lugar seguro donde pudieran comer.
El cargo que pesa sobre McCoy es “transportar a extranjeros indocumentados con fines de lucro”. De ser encontrado culpable, enfrenta hasta diez años de prisión y una multa de $250,000 dólares, por ser considerado un delito grave.
En declaraciones a Arizona Daily Independent, McCoy niega los cargos y asegura que los inmigrantes sí le ofrecieron dinero y que él dijo “sí”, pero solo los estaba engañando.
Ahora con un abogado de oficio, deberá enfrentar el proceso legal bajo fianza.
Arizona es el estado donde proliferaron con más fuerza las milicias armadas que pretenden detener inmigrante indocumentados. El más famoso a mediados de los 2000 fue el “Minutemen Proyect“, aunque de eso solo quedan minigrupos de odio fragmentados y solitarios quijotescos como McCoy.