Este fin de semana cerca de 500 familias de inmigrantes indocumentados –madres e hijos– fueron liberadas de centros de detención migratorios y se refugiaron en una Iglesia Menonita de San Antonio, Texas.
Por: Omar Porcayo
Una jueza texana determinó que los centros de detención familiar del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) en Diley y Karnes, no eran aptas para que se encontraran menores. En otras palabras, que se asemejaban más a una cárcel infantil que a un lugar de refugio y cuidado.
Aunque los inmigrantes en su mayoría originarios de Centroamérica están en diferentes fases de su proceso legal de asilo, fueron liberados de manera masiva desatando una emergencia humanitaria.
ICE negó que la liberación obedeciera al fallo de la corte. A través del portavoz Carl Rusnok, dijo que ya estaba programada y que estarían revisando los señalamientos de la jueza.
Todas las familias recibieron un permiso especial para estar en el país y una fecha para presentarse a la corte, donde se resolverá su situación.
“La Migra” simplemente dejó en la puerta de la organización humanitaria RAICES a centenas de madres y niños que necesitan de lo indispensable para sobrevivir. Obviamente esta liberación sobrepasó la capacidad de ayuda de la institución que gastó cerca de 2,000 dólares en colchones inflables y los ubicó en la Iglesia Menonita de San Antonio, Texas.
La capacidad del centro es de 27 camas y el mayor número de personas que han logrado alojar es de 101.
RAICES ha pedido el apoyo de la comunidad para poder solventar la emergencia. Si estás interesado en ayudar, en este sitio hay información de cómo donar.
Esta situación pone en evidencia el grave problema de las detenciones familiares por parte de ICE. Un reporte de Barrio indicó que eran pocos seguros y no contaban con los recursos necesarios para brindar una estancia digna.
Por años se ha criminalizado a los inmigrantes de una o de otra forma. No solo encerrándolos en centros de detención, sino también en prisiones.
“En EE. UU. las deportaciones son una cosa, pero muchas veces se llevan procesos criminales en contra de migrantes por cruzar la frontera y los ponen en la cárcel, no en centros de detención, sino en la cárcel. Hablamos de 70,000 personas por año”, dijo a Barrio Roque Planas, reportero de The Huffington Post.
Por lo pronto es momento de dar una mano a las madres y niños que en este momento lo necesitan.
Información para ayudar y donar aquí.