Gracias al talento de estos investigadores, en un futuro no muy lejano, esta impresora 3D podrá imprimir mole y guacamole.
Un grupo de científicos mexicanos está trabajando duro para cumplir el sueño de muchos: poder preparar los alimentos con solo un clic.
Esto ocurre en el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej), donde un grupo de investigadores, en conjunto con la empresa Interlatin, intenta perfeccionar su impresora de comida llamada Colibrí 3D.
InterLatin and Colibrí Introducing the Next Generation to 3D Printing http://t.co/AuJi6O5TQ1 pic.twitter.com/3y5bOwuOK0
— 3D Printing News (@My3DPrinting) September 9, 2015
De acuerdo con Zaira Yunuen García Carvajal, una de las colaboradoras del proyecto, esta maravilla le permitirá a cualquiera tener alimentos de muy buen aspecto sin mucho esfuerzo. Y lo mejor es que además, tendrán una consistencia más suave, para que gente adulta o niños puedan comerlos sin problema, y estarán adicionados con lactobacillus y bacterias probióticas que ayudarán a la flora intestinal.
La doctora en tecnología farmacéutica explicó al CONACYT que su prototipo funciona hasta ahora con un software sencillo, donde primero se modela la comida que se desee, y la impresora funciona muy parecido a cualquier otra máquina de impresión en 3D, solo que en lugar de tintas y polímeros tiene ingredientes comestibles.
García Carvajal aclaró que la comida se va “imprimiendo” por varias capas, hasta crear la apariencia y la consistencia deseada. Y lo más complicado para ellos ha ido ir eligiendo los ingredientes que van a utilizar pues deben tomar en cuenta las propiedades físicas y químicas de cada uno, y hasta cuánto tarda en secarse y hacerse duro, para evitar que se haga solo una plasta deforme.
La doctora Zaira confesó que ya han hecho varios experimentos para imprimir postres, usando chocolate y betún, y todo el proceso ha ido evolucionando bien.
Ahora, el equipo se va a enfocar en tratar de crear más combinaciones usando otras preparaciones de comida como mole, guacamole, gelatinas y masa para hot cakes, para poder producir una merienda completa.
En el mercado mexicano esta propuesta es innovadora ya que no existen impresoras fabricadas “en casa” que puedan producir alimentos, ni tampoco las máquinas de este tipo están disponibles para comprarse dentro del país. La propuesta de Colibrí 3D es entonces ofrecer a lo largo de la República Mexicana y en América Latina este producto 100 % hecho en México.