Si hay un platillo que conquista paladares propios y ajenos, y que lleva en cada bocado el tradicional sabor de México, ese es el legendario mole.
Las primeras referencias que se tienen acerca del mole tienen que ver con los guisados que se le servían a Moctezuma, emperador de los mexicas. A esas versiones prehispánicas del que hoy es un emblema de la gastronomía mexicana se les llamaba mulli, que significa salsa, potaje o mezcla.
Si bien el mole poblano es el de más renombre a nivel internacional, actualmente existen muchas versiones de este delicioso platillo y en cada estado de la República se prepara de un modo distinto. Y sin importar qué chiles y especias se utilicen para elaborarlo, el mole es es un reflejo de la riqueza cultural de México y del enorme ingenio y pasión que depositan sus cocineros en la comida que alimenta a nuestros corazones.