Con 56.6 millones de hispanos en los Estados Unidos, un presidente de origen mexicano ya no es un sueño guajiro.
Por: Omar Porcayo
Tenaz defensor de los derechos de los inmigrantes y valiente opositor de la retórica divisiva de Donald Trump, Julián Castro es uno de los políticos latinos más destacados del momento y una de las cartas fuertes del Partido Demócrata para recuperar la presidencia.
Sí, el exalcalde de la ciudad de San Antonio, Texas, ha develado sus intenciones de contender a la presidencia de los Estados Unidos en 2020. Castro aceptó en un evento de Voto Latino celebrado en la Universidad de Texas, que su agenda en 2018 contempla el análisis de sus posibilidades para pelear por la candidatura.
El mexicoamericano de 43 años cuenta con un impecable historial de servicio público en las más altas esferas de la política estadounidense, pues fue Secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano durante la administración de Barack Obama.
#FBF with @JoaquinCastrotx Summer '96 pic.twitter.com/CCQXWOpqgo
— Julián Castro (@JulianCastro) August 18, 2017
En la campaña electoral de 2016, su nombre fue muy señalado para ser candidato a la vicepresidencia, pero a la postre fue Tim Kaine quien acompañó a Hillary Clinton en la fórmula que perdió con Trump.
Castro es nieto de inmigrantes mexicanos que llegaron a Estados Unidos en busca del Sueño Americano, y que como miles, decidieron servir en lugar de servirse del país. Su padre es un maestro retirado y su madre fue activista, por lo que el trabajo por la comunidad le corre por las venas.
Con gran valentía, el legislador ha sido una de las voces más críticas de las políticas discriminatorias de Trump. Su férrea oposición a la embestida contra los inmigrantes, las agresiones a las ciudades santuario y la complacencia ante los grupos de supremacía blanca, lo han enfrentado directamente con la Casa Blanca.
This guy lied his way onto @Forbes richest list and continued lying as Commerce Secretary. Is anyone honest in Trump's administration? https://t.co/PcfjFGMna5
— Julián Castro (@JulianCastro) November 7, 2017
En febrero su hermano gemelo, Joaquín Castro, actual congresista por Texas, se convirtió en el primer legislador en presentar una moción para investigar a Trump por violaciones a la ley, que podrían acarrear un juicio político al mandatario.
El reciente descalabro de los republicanos en las elecciones locales en Virginia, Nueva York y Nueva Jersey, reanimó las posibilidades demócratas de cara a los próximos comicios legislativos de 2018. A decir de analistas, el electorado castigó el “Trumpismo” y premió los rostros nuevos en la baraja de funcionarios públicos, por lo que las posibilidades de Julián son reales.
Happy Birthday to our wonderful mom, Rosie Castro! 70 years young today. We love you. And may you have many, many more! @castrocountry pic.twitter.com/vDdZJsyRVj
— Julián Castro (@JulianCastro) May 8, 2017
Además, debería de considerar que la población hispana llegó a su máximo histórico de 56.5 millones de habitantes, de los cuales, 35.7 millones son mexicanos y la mayoría tiene derecho a votar.
Las proyecciones demográficas indican que para 2050 la población hispana ocupará un lugar preponderante en los Estados Unidos, por lo que un presidente de origen mexicano, ya no suena a una película de ficción.