El actor Rubén Aguirre dejó huella con varios de sus personajes, pero sin duda, el más entrañable de todos, fue el a veces gruñón, dentro de todo bonachón, profesor Jirafales.
Eran otros tiempos. El “Maistro Longaniza” sacaba su puro en el salón de clases, y seguramente Ñoño lo veía como un hombre de mundo.
El profesor Jirafales cortejaba a la mamá de uno de sus alumnos, y Quico podía vivir con ello sin problemas.
Cuando perdía por completo la paciencia, gritaba y llamaba burro al pobre Chavo.
Y a pesar de que la Popis y la Chilindrina también le ponían los pelos de punta, este maestro hacía todo lo posible para que sus alumnos aprendieran… aunque fuera solo un poco.
Este viernes, a los 82 años de edad, falleció Rubén Aguirre, el actor que durante años le dio vida al profesor más famoso y querido de América Latina.
¿Por qué se le quiso tanto?
El profesor Jirafales era un hombre educado, pulcro, amoroso (Doña Florinda lo sabe bien), y aunque a veces no lo pareciera, era un soñador.
En un capítulo en el que Don Ramón, el personaje interpretado por el también fallecido Ramón Valdés, asistió a la escuela, el maestro nos dio una lección inolvidable.
“¿Por qué sigue en esto, profesor”, le preguntó Don Ramón incrédulo de su vocación. Su respuesta fue ejemplar:
Porque a pesar de todo, Don Ramón, tengo fe en los niños. Y si queremos construir un mundo mejor, aquí están los cimientos.
Un mensaje profundo para un simple show de comedia, ¿no?