#Interesante: Dormir es esencial para tu salud

#Interesante: Dormir es esencial para tu salud

La falta de sueño afecta negativamente al trabajo, al humor, a la familia, a los hábitos de manejo, a las relaciones sexuales, y a la salud en general.

Nuestra dinámica de sueño ha cambiado constantemente a lo largo de las últimas décadas. La dependencia a la televisión, los teléfonos celulares y las computadoras portátiles está costando mucho a la población en términos de sueño, según los especialistas.

La importancia del sueño radica en su función para deshacerse de los residuos. Para ello, el cerebro utiliza el sistema glinfático. Este sistema tiene la tarea de eliminar toxinas, incluida la beta amiloide, una proteína que se encuentra acumulada en los cerebros de los pacientes con enfermedades como Alzheimer.

Este sistema es 60% más productivo cuando estás durmiendo. Allí la importancia de no saltarse horas de sueño. De lo contrario, el cerebro pierde la oportunidad de deshacerse de los productos de desecho. Si deseas aumentar el ritmo de limpieza, un estudio de la Universidad de Stony Brook, en el estado de Nueva York, concluyó que parece funcionar mejor el sistema si se duerme de lado.

Además de su función purificadora, el sueño también tiene una influencia positiva en el corazón y el sistema inmunológico. Diferentes estudios han demostrado que dormir mal aumenta el riesgo de presión arterial alta, ataques cardiacos, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia cardiaca.

En 2015, un estudio en la Universidad de California descubrió que, después de haber estado expuestos al virus del resfriado, las personas que dormían seis horas o menos tenían más probabilidades de desarrollar el resfriado, comparado con los que dormían durante siete horas o más.

Ahora bien, muchas personas confunden la somnolencia, que es la falta de sueño, con la fatiga. La falta de sueño da como resultado la somnolencia. La sensación de somnolencia en sí misma representa un deseo de dormir, mientras que la fatiga se describe con mayor precisión como falta de energía. Los dos términos tienen significados diferentes, pero a menudo son utilizados de manera indistinta.

La fatiga puede ser causada por la falta de sueño, pero hay varios otros factores que podrían llevar a esta condición. Una persona que sufre de fatiga puede tener una deficiencia de vitamina B12, podría haber desarrollado diabetes, o podría estar experimentando depresión. Por lo tanto, aquellos que hacen un esfuerzo consciente para mejorar su sueño, y todavía se sienten fatigados, deben hablar con su médico.

Por el contrario, la somnolencia tiene generalmente tres causas comunes. La primera es la medicación, ya que algunas drogas pueden adormecernos. La segunda es la falta de sueño, que es cuando duermes menos de lo que necesitas. La falta de sueño aumenta el deseo de dormir, y en este sentido, la somnolencia funciona de una manera similar al hambre. La última causa es la disfunción del sueño. Esto significa que duermes, pero mientras estás descansando, cierto aspecto no funciona como debería.

La importancia de una buena higiene de sueño.

El término higiene del sueño se refiere al proceso de control de nuestro entorno y al comportamiento que tenemos antes de acostarnos.

Charles Czeisler, de la Escuela de Medicina de Harvard y del Brigham and Women’s Hospital de Boston, dijo que la exposición a luz artificial antes de ir a dormir puede aumentar el estado de alerta y suprimir la liberación de melatonina, la hormona que induce el sueño.

De allí la importancia de una buena higiene de sueño. El primer paso podría ser la preparación del dormitorio. Como la luz te mantiene despierto, tu habitación debe estar sumergida en completa obscuridad o lo más cercano a ello.  Esto se debe a que tus ojos detectan cuando está obscuro y envían señales a tu cerebro. Lo anterior genera que la glándula pineal produzca melatonina, el químico responsable de hacernos sentir con sueño.

Si estás expuesto incluso a la menor cantidad de luz, este proceso se interrumpirá. Por lo tanto, es una buena idea apagar el teléfono o colocarlo en otra habitación cuando vayas a dormir. También es recomendable no ver la televisión en la cama.

Es igualmente importante asegurarse de que nos sintamos cómodos en la habitación. De firme a suave, hay cientos de colchones diferentes para elegir. El tipo de colchón no importa, siempre y cuando uno se sienta cómodo.

Si el ambiente general del dormitorio, o incluso el dormir por sí mismo, inspira sentimientos negativos, puede ser el momento de un cambio de imagen completo. Intenta colgar algunas cortinas nuevas, cambiar los muebles, o incluso pintar las paredes de un color diferente.

Debido a que nuestro cuerpo desea automatismos, otra idea útil para dormir mejor es desarrollar una rutina para dormir. Es muy probable que en nuestra infancia hayamos tenido una rutina: cena, baño, cuento antes de dormir, y luego dormir. La edad adulta no está limitada a estas actividades; por el contrario, nos ayudan a tener orden.

Hagas lo que hagas, solo asegúrate de mantener hábitos constantes para que tu cuerpo pueda adaptarse a ellos. Mejorar la higiene del sueño es una excelente manera de dormir mejor.