Estados Unidos les ha dado la espalda a cientos de hombres que pelearon bajo su bandera.
Un nuevo reporte indica que el gobierno de los Estados Unidos ha deportado al menos a 239 veteranos indocumentados desde el fin de la guerra contra Vietnam.
El reporte de ACLU California denominado “Discharged, Then Discarded“, incluye un análisis profundo de 59 casos de exmiembros del ejército que enfrentan la deportación, a pesar de su servicio al país.
“Es un trágico y lamentable ejemplo de qué tan roto está nuestro sistema migratorio”.
La mayoría de los veteranos expulsados, vivieron en el país desde niños y tuvieron que dejar hijos estadounidenses. Fueron acusados de crímenes menores, cumplieron su sentencia y aun así, los echaron.
El documento de 60 cuartillas indica que el gobierno falló en informar a los militares que su naturalización no era automática al servir, tampoco hizo lo necesario por completar el proceso durante sus carreras y perdió, o falló con las solicitudes de ciudadanía.
Por si fuera poco, las investigaciones señalan que los veteranos deportados a México y Centroamérica, son acosados por las bandas criminales para que se unan a ellos, bajo amenazas a sus familias.
Ni qué hablar de la falta de atención médica y condiciones precarias en las que tienen que vivir fuera de la nación.
“Estoy celoso. Estoy celoso de todos mis hermanos que murieron en Vietnam. Celoso de que ellos estén descansando en paz, mientras yo estoy atascado aquí, en Tijuana”, decía Gonzalo Chaidez, un veterano estadounidense que sirvió en la guerra de Vietnam y vivió en California como residente legal por 50 años, hasta que fue deportado por cometer agresión cuando era vagabundo. Murió de tuberculosis en México, en marzo de 2015.
En mayo, durante un acto de campaña, el Senador Bernie Sanders se acercó a la barda fronteriza con México y dijo al veterano Héctor Barajas, lo que todos pensamos.
“Gracias por su servicio, usted debería estar de este lado”.
Facebook
Twitter
Instagram