El poblano ya le está preparando el camino a la Selección Nacional en el Mundial, enseñándoles a los rusos que en México hay puras cosas buenas.
Augusto Romero es un cocinero originario del estado mexicano de Puebla que vive en Rusia desde hace cuatro años. Nunca había imaginado irse a ese país, pero durante una visita a Nueva York conoció a una mujer… y se enamoraron.
Después de casarse, el chef se convenció de irse a vivir con la familia de su esposa. Pero, como todos los mexicanos, una vez instalado en Estados Unidos, extrañaba demasiado la comida de su país y decidió abrir un restaurante de comida rápida tradicional.
“No había un lugar donde se comieran unos tacos de verdad, por eso decidimos un socio y yo abrir en un mercado un restaurante de comida verdaderamente mexicana”, declaró Augusto a Hoy Los Ángeles.
El local recibió el nombre de “El Mexicano” y no solamente ofrecía a los rusos la posibilidad de saborear los platillos tradicionales de México, sino que también podían tomar allí talleres para aprender a cocinar.
El chef confesó que la mayoría de quienes iban a sus clases de cocina no recordaban mucho de las lecciones, pero lo importante era que conocían el sabor de los tacos y una buena salsa. “Lo que me interesa es que el día de mañana se lleven un buen recuerdo de México”, aseguró a Un Nuevo Día.
Romero agragó que “El Mexicano” ha tenido una excelente aceptación en el país, pues a los rusos les intriga mucho el sabor de las salsas y la enorme variedad de ingredientes que estas incluyen.
Su menú incluye flautas, gringas de pastor, chapulines, nachos, quesadillas con tortillas hechas a mano, elotes con chile en polvo y agua de horchata y de jamaica.
El poblano confesó que espera que para la Copa del Mundo puedan recibir a muchos paisanos, pues su negocio será para ellos como un oasis de sabor. Y lo mejor es que está a tan solo seis kilómetros del estadio donde se disputará el partido de México ante Alemania.