Decidió ponerse el sombrero de charro y darle la vuelta al mundo.
Por: Grethel Delgado
Al estilo de los antiguos juglares que viajaban por distintos pueblos, un mariachi recorre el mundo con un mensaje de paz y unidad.
Su nombre es Karim Hauser, tiene raíces mexicanas pero sus ramas son muy viajeras. De madre egipcia y padre mexicano, nació en Monterrey, Nuevo Léon, y luego se mudó a la Ciudad de México. Es especialista en relaciones internacionales y trabajó como periodista en BBC Mundo.
Un viajero inusual
“La vida es el arte del encuentro, decía Vinicius de Moraes. Y yo me la creí. El sombrero, las botonaduras y la sonrisa como tarjeta de presentación”.
Argentina, Chile, Qatar, Francia, Portugal, Egipto y España son algunos de los lugares que el entusiasta mariachi ha visitado en su largo periplo.
La idea de Mariachi In Transit surgió a partir de que Hauser cumpliera 40 años. Considerando que la decisión fue impulsada por la “crisis de los cuarenta”, en su caso se trató de una idea muy creativa. Además, le inspiró la lectura del libro “Cómo viajar sin ver (Latinoamérica en tránsito)”, de Andrés Neuman.
Karim habló con Barrio acerca de algunos de sus propósitos con este personaje viajero, que es una especie de alter ego y un mensajero de paz.
“Creo que mi proyecto se ha convertido en un esfuerzo de humanizar al otro y de reflejar la hermosa diversidad que habita nuestro planeta. Cada vez estamos más expuestos a que los seres humanos sean considerados como cifras, estadísticas y me parece muy importante contar las historias que hay detrás”, afirmó.
Karim Hauser ve el mundo como un gran escenario, sin fronteras ni diferencias entre los seres humanos. Aunque lleve un traje llamativo y un sombrero de charro, su lenguaje es universal y logra conectar con personas de culturas muy diversas.
“Hay contextos en los que resulta difícil confiar más en los demás, pero hay que tener iniciativas para descubrir quiénes son, sin saltar a conclusiones por las apariencias”.
No solo provoca risas y curiosidad entre las personas que encuentra a su paso. El mariachi lanza un mensaje de inclusión y comunicación, elementos que hacen tanta falta en la actualidad.
El periodista se apoya en sus conocimientos políticos y culturales para entrar en contacto con personas de todo el mundo. Hablar muchos idiomas también le abre las puertas de la comunicación. Aunque su sombrero y un gesto amistoso son sus mejores herramientas.
Postales de viaje
Mariachi In Transit ha sido invitado por extraños a dar una serenata a una madre. En Cambridge fue admitido en un partido de cricket, a pesar de que no iba vestido de blanco; y hasta lo invitaron a beber cerveza.
En Doha, le prestó su sombrero a un iraní para que saludara a unos sauditas, a pesar de que estas dos nacionalidades están en conflicto. Y en pleno París comenzó a hablar en árabe con unos argelinos.
“Creo que la educación es imprescindible para poder hacer frente a la discriminación”.
Ante la cuestión de cómo enfrentar un mundo lleno de discriminación y separaciones, Hauser tiene una postura positiva. Resalta el valor del conocimiento como arma principal.
Karim aconseja “conocer la historia de México y de EE. UU., interesarse por sus derechos fundamentales y el resto del mundo, ser respetuoso con el medio ambiente, cuestionar la información de los medios y la violencia en sus múltiples formas”.
“Y claro, cultivar el sentido del humor que tanto nos caracteriza y disfrutar de los colores y sabores de la vida. Estar orgulloso de quiénes somos, y si somos biculturales o binacionales, celebrar las posibilidades que eso nos da más que buscar conflictos o reprimir una de nuestras identidades”, concluyó.
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