Parece que la bandera blanca comienza a asomarse en el cuartel de Sanders. Por primera vez admitió que su nominación es improbable (léase, imposible).
¡Ya te habías tardado, Bernie!
El Senador Sanders finalmente aceptó que su carrera por la presidencia de los Estados Unidos ha terminado. En una entrevista con Steve Scully de la cadena C-SPAN, dejó ver que irá a la Convención Demócrata de julio en Filadelfia, con la intención de hablar, pero sin la ilusión de arrebatar la nominación que Hillary Clinton ganó en las urnas.
“No parece que voy a ser el candidato, por lo que no voy determinar el alcance de la convención”, expresó.
A pesar de que Clinton obtuvo los 2,383 delegados necesarios para ser reconocida como la virtual candidata, el político independiente se ha negado a levantarle el brazo, poniendo una presión extra al interior del partido.
“Sería bueno poder hablar en la Convención Demócrata. Si por cualquier razón no quieren que hable, entonces, lo que sea. Pero yo creo que voy a hablar en la convención”, agregó.
¿Qué sigue para Sanders y sus seguidores?
Sanders impulsó una campaña que se convirtió en un movimiento por una reforma en la plataforma demócrata, así que nadie espera que simplemente se vaya a su casa.
La oficina del senador anunció que en el mitin de este jueves por la noche en New York, “Bernie” mirará de frente a sus seguidores para determinar “a dónde se dirigen ahora“.
El discurso que pronuncie será determinante de cara a la elección general del 8 de noviembre, pues acumuló una gran cantidad de recalcitrantes seguidores que ahora deben decidir si apoyar a Clinton, a Trump, o simplemente abstenerse.
Si la cordura prevalece, Sanders invitará a sanar las heridas internas y a la unión para hacer frente a los republicanos y su “virtual candidato”.
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