Cunde el pánico entre migrantes en EEUU por amenazas de Trump

La "cacería" de Donald Trump ha encendido alarmas tanto en migrantes legales como indocumentados que residen en Estados Unidos

El “sueño americano” se transforma en “incertidumbre” para los migrantes que tienen una situación legal y en una “pesadilla!” para quienes no han logrado regularizar su estatus en los Estados Unidos. En la comunidad de migrantes, de todos los orígenes, cunde el pánico tras las decisiones que apuntan a una especie de “cacería de migrantes”, que adopta el reestrenado presidente estadounidense.

La directriz es…

Donald Trump prometió comenzar con redadas a migrantes ilegales y deportaciones masivas. Ha cumplido.

Deportaciones hacia Centroamérica, a Colombia, impasse diplomático de por medio, son parte de las medidas que la nueva administración de los Estados Unidos puso en marcha.

Extraoficialmente los medios estadounidense han señalado que Trump está descontento con la poca cantidad de “ilegales” detenidos. Se señala que Trump está exigiendo “un mínimo” de 1.500 detenidos diarios para poner en práctica las deportaciones masivas.

Esto dispara las alarmas de los migrantes legales e ilegales. Se espera una ofensiva de los cuerpos de seguridad y las autoridades migratorias que podría impactar no solo a los “ilegales”, sino a toda la comunidad de extranjeros ya que temen el acoso y las consecuencias de la presión en su entorno debido a que, para nadie es un secreto, la solidaridad de los coterráneos independientemente de su estatus jurídico.

En Chicago el  gobierno de Trump lanzó una ofensiva de control de inmigración que autoriza a varias agencias federales a detener a inmigrantes indocumentados. Esta ciudad parece ser el modelo de un plan piloto para desarrollar esta decisión de Trump.

Esto forma parte de la estrategia planteada que impulsa un esfuerzo más amplio para agregar personal al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), que tiene limitantes en materia de recursos y personal. La idea es fortalecer con equipos y personal en la misión de ubicar a los indocumentados.

Se espera que los agentes del ICE se unan a funcionarios de varias agencias del Departamento de Justicia y , de esta forma, elevar la eficiencia de los operativos que, hasta ahora, no han sido lo eficientes que aspiraría el nuevo inquilino de la Casa Blanca.

Mientras esto pasa, las comunidades de migrantes legales e ilegales se mantienen en alerta esperando el momento en que la ofensiva de la administración Trump toque su puerta o los detenga en la calle.