Un sheriff revisó los antecedentes de ciertas personas, en un claro caso de discriminación.
Por: Omar Porcayo
Ni las catástrofes naturales ablandan el corazón de los antiinmigrantes. Y es que bajo el pretexto de evitar la entrada de criminales a los refugios durante la emergencia por el huracán Irma en Florida, un sheriff impidió el acceso a un latino, por lo que ahora enfrenta una demanda.
Grady Judd, sheriff del condado de Polk, ganó fama nacional cuando en medio del desastre dijo que en la cárcel había refugio para los criminales. No conforme con esas desafortunadas palabras, hizo una revisión de antecedentes “selectiva” a algunas personas que solicitaban ingresar a un albergue.
Andrés Borreno de Virginia, aseguró en una demanda ingresada electrónicamente en el décimo circuito judicial, que los oficiales le exigieron una revisión de sus papeles para dejarlo ingresar, violando la Cuarta Enmienda.
“Los policías nunca le dijeron a Borreno que era sospechoso de algún crimen o acto ilegal… No puede haber sospecha de crimen solo por intentar ingresar a un refugio para salvar la vida de su familia”, se lee en la demanda que hizo pública Orlando Sentinel.
Borreno presentó su acusación auspiciado por el grupo proinmigrante de Florida Nexus Services, ya que hay un dejo discriminatorio en todo este asunto.
Autoridades estatales habían anunciado que todas las personas podrían acudir a un albergue sin miedo a ser detenidas por procesos legales o su estatus migratorio, sin embargo a Judd, poco le importó.
“La demanda es frívola y solo busca atención gratis”, respondió Judd, quien insistió en que buscaba impedir a criminales ingresar a los centros de emergencia. “Revisamos a todos los que querían venir al refugio para asegurarnos de que no hubiera un depredador sexual o un pederasta”.
Judd reveló sus tendencias políticas en torno a la inmigración luego del perdón que otorgó Donald Trump al exsheriff Joe Arpaio. Justificó las acciones del presidente y dijo que Obama había indultado a verdaderos criminales.
Ahora deberá enfrentar a la ley… la de verdad.
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