Cuando a altas horas de la madrugada se dio por un hecho que Donald Trump sería el próximo presidente de los Estados Unidos, no hubo país extranjero más asustado que México.
Después de un año de insultos y amenazas a ese país y sus ciudadanos, el triunfo del empresario desató la zozobra. Radio, televisión, Internet, charlas de café… en el país no se habla de otra cosa más que del nefasto resultado de la elección estadounidense.
En un intento por llamar a la serenidad, el presidente Enrique Peña Nieto emitió un discurso la tarde del miércoles en el que dijo que se comprometerá “en cuerpo y alma” en velar por la seguridad de los mexicanos dondequiera que estén.
“Con la nación norteamericana tenemos lazos inseparables. El mejor ejemplo es la comunidad mexicoamericana. De ambos lados de la frontera los mexicanos vamos a seguir trabajando con el mismo empeño de siempre, vamos a abrir nuevos caminos para la cooperación y la prosperidad”, aseguró desde la residencia oficial de Los Pinos.
“Como presidente me entregaré en cuerpo y alma a velar por el bienestar de los mexicanos dondequiera que estén. Esa siempre ha sido mi prioridad”, expresó en clara alusión a los millones de inmigrantes a los que Trump amenazó con deportar.
Desde que se comenzaron a conocer las tendencias de la jornada electoral, la moneda mexicana se devaluó hasta un 13 %. Una de las peores caídas de su historia, por lo que Peña Nieto se apresuró a mostrar su intención de trabajar con los Estados Unidos.
“En su discurso de victoria, el presidente electo Trump expresó su intención de trabajar con todos, buscando coincidencias y no hostilidad. México comparte esa visión”.
“Hace unos momentos hablé con él para expresarle mi felicitación. Hice la felicitación extensiva a los miembros de su familia. Debo decir que fue una conversación amable, cordial y respetuosa”, confesó Peña Nieto, que invitó a finales de agosto a Trump a México, en una muy polémica visita.
“Coincidimos que debemos trabajar juntos, y que nuestros países son importantes el uno para el otro. Somos aliados, amigos y vecinos. Cuando le va bien a México, le va bien a Estados Unidos y viceversa”.
Peña Nieto dijo que se reunirá con Trump durante la etapa de transición que inicia este jueves con la visita del presidente electo a la Casa Blanca.
“Acordamos que nuestros equipos comiencen a trabajar en los temas de interés común. A partir de esta agenda acordé que nos reunamos para definir con toda claridad el rumbo que va a tomar la relación”.
Facebook
Twitter
Instagram