Sus obras son mensajes de empoderamiento latino, nos enseñan a valorar las raíces y no dejar nuestras culturas en la frontera.
Por: Grethel Delgado
Orgulloso arte chicano, resistencia y conciencia social definen a Jake Prendez. Nacido en Hemet, California, Prendez es hijo de un italiano y de una mexicana nacida en un campo de trabajadores migrantes conocido como La Colonia. Su arte es una manera de homenajear su herencia mexicana.
El trabajo de Jake se basa mayormente en óleos y acrílicos sobre lienzo, aunque también hace trabajos digitales, como en el caso de su serie “Códices contemporáneos”.
Prendez comentó a Barrio sobre el germen de esta serie, que comenzó en el 2013 y hasta el momento cuenta con 6 imágenes digitales. La serie inició con una pregunta que el artista se hizo: “¿Si todavía estuviéramos creando códices como nuestros ancestros, cómo se mirarían estos?”.
“Reafirmo mis raíces culturales con mi trabajo y a la vez doy tributo a mis ancestros”.
Una juventud difícil
Prendez tuvo que lidiar con muchos problemas durante su juventud. Tocó fondo y no encontraba la salida, pero gracias al arte logró transformar todo eso en un resultado provechoso.
“Me crié en una comunidad mayormente anglosajona en Seattle. Yo era uno de aproximadamente 10 latinos en toda mi preparatoria”.
“Tenía que defender mi raza constantemente de estudiantes y maestros racistas. Es muy fácil ser chicano cuando vives cerca de otros chicanos, pero es muy difícil ser chicano cuando eres el único de la comunidad”, dijo.
“Tuve momentos difíciles cuando era joven. Además de batallar con muchos estudiantes y maestros racistas, también tenía muchos problemas en casa. En ese tiempo no tenía a nadie que me apoyara. Sin ninguna forma de expresarme, me empecé a involucrar en cosas negativas”, confesó Prendez.
Después de atravesar por momentos tan oscuros, Prendez aprendió a valorar el papel de la educación. Dedica parte de su tiempo a orientar a los jóvenes a través de talleres y charlas. Su interés es transmitir la apreciación del arte a los más jóvenes, así como la conciencia social y el orgullo latino.
“Ser un adolescente no es fácil y no quisiera hacerlo de nuevo. Ahora trato de ser la persona que yo hubiera querido ser durante mi juventud. Ahora veo la importancia de tener gente positiva en tu vida, gente que te diga que tú importas”.
En la Universidad de Washington obtuvo una Licenciatura en Estudios Étnicos y posteriormente cursó una Maestría en Estudios Chicanos en California State University, en Northridge.
“Comencé a equiparme con conocimientos desde joven y empecé a leer muchos libros sobre el movimiento chicano. Mis conocimientos y orgullo de mi gente se han hecho inseparables de mi arte”.
“Bienvenido a la familia, paisano”
Los momentos difíciles nos ayudan a vivir, pues aprendemos de los errores y damos pasos más seguros. Prendez, orgulloso de sus raíces, aconseja que nunca perdamos los sueños.
“Nuestras comunidades necesitan amor y la medicina de nuestros ancestros; son resistentes. Descendemos de grandes personas y hacemos cosas asombrosas. Hay una vibra y energía increíble en nuestras comunidades que no cambiaría por nada”.
“Si te has venido a los Estados Unidos recientemente para construir una vida mejor para tu familia, recuerda que no tienes que dejar tu cultura en la frontera. Sea la que sea tu habilidad o tu talento, arte, poesía, música, construcción, crear eventos, usa ese talento para hacer a tu comunidad más fuerte”, afirmó.
“Quizás hayas venido solo, pero ahora eres parte de una comunidad de este lado de la frontera. Bienvenido a la familia, paisano”.
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