El presidente de México sigue intentando limpiar el desastre que provocó su reunión con Trump la semana pasada.
Enrique Peña Nieto le explicó a Barack Obama que su intención al invitar a Donald Trump a Los Pinos, era “moderar” sus posicionamientos en contra de México.
En un mensaje a los medios de comunicación al finalizar la reunión de los líderes del G20 en China, el mandatario mexicano dijo que durante el encuentro que sostuvo con su homólogo estadounidense, le expresó que para México era “legítimo” procurar un espacio para puntualizar su relación con EE. UU.
“[Hablamos] del interés de México por reinventarnos en un espacio de diálogo ante lo que hoy estamos observando, que México está siendo parte del debate, como quizá no había ocurrido en otro momento, y hoy inédito, de los candidatos a la presidencia de Estados Unidos”, dijo.
A pesar de la ola de críticas que recibió a nivel internacional, Peña aseguró que encontró en Obama “toda la disposición y voluntad para trabajar de manera conjunta”.
Y es que de acuerdo a analistas, la improvisada cumbre permitió a Trump legitimar su polémica propuesta de construir un muro en la frontera sur con México, y lo fortaleció en un momento donde su campaña iba en declive.
Además, pudo interpretarse como un desaire a la candidata demócrata, Hillary Clinton, quien criticó la visita de Trump a México desde el primer momento.
Hay que recordar que Obama invitó a Peña Nieto a Washington en julio, justo en medio de las convenciones nacionales de los partidos. En un momento justo para enviar un mensaje frontal y poderoso en contra de la retórica racista del empresario neoyorquino, pero la tibieza del mexicano dejó pasar la oportunidad.
Han pasado ya cinco días desde la visita de Trump y el enojo en un gran sector de la población mexicana no parece disminuir.
De hecho, varias organizaciones han convocado a una marcha el 15 de septiembre en la Ciudad de México, para pedir la renuncia del presidente Peña Nieto. Justo en esa fecha tiene que dar el tradicional grito de Independencia en el Zócalo.
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