El cineasta obligó a la gente a ponerse en la piel de los migrantes y los estremeció hasta la médula.
Alejandro González Iñárritu demostró de nuevo que los mexicanos hacen posible lo que pareciera imposible, y ahora recibió un premio Óscar por algo que ni siquiera es una película.
El director recibió un reconocimiento de La Academia por su instalación artística “Carne y Arena: Virtualmente presente, físicamente invisible“, que realizó al lado de su paisano Emmanuel “El Chivo” Lubezki, y que reproduce las condiciones a las que los migrantes latinoamericanos se enfrentan para poder llegar a Estados Unidos.
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El presidente del organismo, John Bailey, dijo en un comunicado que, “los Gobernadores de la Academia se enorgullecen en presentar un Oscar especial a ‘Carne y Arena’, en la que Alejandro Iñárritu y Emmanuel Lubezki abrieron para nosotros nuevas puertas de la percepción cinematográfica”.
Making history: The conceptual VR installation “Carne y Arena” receives a special Oscar from our Board of Governors.https://t.co/JQdJglS9dX pic.twitter.com/pd7piL77ij
— The Academy (@TheAcademy) October 27, 2017
En la página oficial de “Carne y Arena” se explica que la obra está basada en relatos reales de migrantes que el mismo director entrevistó.
Iñárritu confesó que llevaba cuatro años trabajando en el proyecto y que lo realizó con la finalidad de lograr “un espacio que permita al visitante vivir la experiencia directa de caminar con los pies de la persona migrante, ponerse en su piel y llegar hasta su corazón”.
En México la instalación causó asombro desde antes de que se abriera, pues se advertía que no era apta para todo público y antes de entrar todos los visitantes deben firmar un oficio en el que liberan a los organizadores de toda responsabilidad.
Una de las visitantes aseguró que los ejercicios que se viven en la exposición llegan hasta la médula, y realmente son impresionantes.
La instalación de arte visual de Iñárritu fue inaugurada en mayo pasado en el Festival de Cine de Cannes, y se trató de la primera película de realidad virtual en la selección oficial del evento.
“Carne y Arena” está disponible en el Centro Cultural Universitario de Tlalelolco, en la Ciudad de México, y advierte a todos que atreverse a vivir en carne propia el camino de los migrantes puede ser una experiencia perturbadora.
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