La pandemia no deja que las personas saquen lo peor de ellas y este es un caso que deja en claro dicha situación.
El Covid-19 no sólo esta dejando millones de afectados o muertos, también está sacando la peor cara de los ciudadanos y esta historia que sucedió en Estados Unidos es claro ejemplo de ello.
Y es que una mujer de 29 años que trabajaba en la casa de retiro Carillon en la comunidad de Bellevieu, en Denver, Colorado fue detenida por haber robado un anillo de compromiso y una tarjeta de crédito a una adulta mayor que murió a causa de COVID-19.
El nombre de esta persona es Elizabeth Daniels, una trabajadora eventual que fue descubierta tras el robo el pasado 15 de abril.
Las pertenencias están valuadas entre 20 mil a 25 mil dólares y el hurto se descubrió cuando los familiares de la persona fallecida detectaron la ausencia del anillo. Además, el mismo día del fallecimiento, la tarjeta de crédito fue usada para comprar un vehículo usado por 200 dólares.
Tras días de investigación, las autoridades dieron con la responsable y su ubicación, por lo que el pasado 17 de abril un juzgado emitió una orden de arresto contra la trabajadora y y tres días después quedó detenida.
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