¿Son o se hacen? Cómo es que la gente se cree los cuentos de Trump.
La criminalización de los inmigrantes que promueve Donald Trump ha surtido efecto. Una encuesta reciente de HuffPost/YouGov muestra que la gran mayoría de los seguidores del presidente creen que la pandilla Mara Salvatrucha o MS-13 es una amenaza nacional e incluso que podría atacarlos directamente.
Trump ha realizado una campaña desinformación para ligar a los inmigrantes con el crimen, sacando de proporción el alcance de la MS-13 y generalizando esa imagen entre la comunidad indocumentada; Además la deshumaniza con palabras como “animales” y “plagas”.
El plan de los ideólogos de Trump marcha sobre ruedas, pues el 85 % de sus electores cree que los maras son una amenaza para Estados Unidos y más de la mitad teme ser agredida por ellos. Entre las personas que votaron por Hillary Clinton el porcentaje se reduce al 32 % que los consideran una amenaza para el país y solo el 13 % piensa que puede ser violentada.
Datos del Departamento de Seguridad Nacional indican que la Mara Salvatrucha tiene 10,000 miembros activos y su influencia se reduce a algunos barrios de ciudades específicas. El número de pandilleros asociados no ha crecido en más de una década.
Por si fuera poco, las redadas que ha conducido el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en contra de las pandillas, han logrado arrestos en su mayoría de personas estadounidenses.
Los crímenes de la MS-13 en su gran mayoría son cometidos en contra de minorías e inmigrantes, pero Trump ha encontrado en ellos al perfecto enemigo para crear un golem con el cual asustar a la población y justificar su acometida antiinmigrante.
Si bien los crímenes de la MS-13 son todos condenables, analistas de The New York Times describen a la pandilla como desorganizada y poco financiada, lejos de un cartel que pudiera desestabilizar al país o represente una amenaza de seguridad nacional.
En medio de severas críticas y señalamientos de traidor por respaldar al presidente de Rusia, Vladimir Putin, este miércoles Trump volvió a sacar su as bajo la manga para apaciguar a su público y pidió al Congreso que apruebe fondos para construir un muro para evitar una supuesta invasión de la MS-13 al país.
The two biggest opponents of ICE in America today are the Democratic Party and MS-13!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) July 18, 2018
Los efectos de la imaginaria guerra contra la pandilla tienen otros efectos más graves, como el respaldo de parte de la población a la política de tolerancia cero que ha separado a miles de niños de sus padres y favorece un clima de linchamiento y abusos de las autoridades contra inmigrantes.
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