Todos los seguidores de Trump que creyeron que México pagaría el muro, deberían comenzar a ahorrar.
Por: Omar Porcayo
“¿Quién pagará por el muro? ¡México!, ¿Quién pagará por el muro? ¡México!”. Esa era la arenga con la que Trump conquistó a millones de estadounidenses, sin embargo rápidamente, rompió su promesa.
Este jueves el presidente Donald Trump presentó su primer presupuesto con recortes históricos a varias agencias, para poder destinar una cifra récord al Departamento de Defensa y a la construcción del infame muro en la frontera sur con México.
La propuesta le pegó duro a la Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés), con recortes superiores al 30 %. Por el contrario incrementó en 54,000 millones de dólares el gasto para las fuerzas armadas, lo que se traduce en el mayor desembolso en este rubro desde 1980 durante la administración Regan.
“Un presupuesto que pone a Estados Unidos en primer lugar debe hacer de la seguridad de nuestro pueblo su prioridad número uno, porque sin seguridad no puede haber prosperidad”, expresó Trump en un mensaje con el que acompañó la propuesta.
Los recortes de Trump a diversas agencias que incluyen la divulgación científica, hicieron espacio para solicitar 4,500 millones para luchar contra la inmigración indocumentada. De esa exorbitante cifra intenta destinar 2,600 millones al inicio de la construcción del muro calculado en 21,000 millones.
El plan no presenta ninguna alternativa para que el gobierno mexicano reembolse el gasto de los contribuyentes estadounidenses, como Trump ha declarado una y otra vez.
Enrique Peña Nieto, presidente de México, ha reiterado que no pondrán un peso para la indignante construcción de más de 1,900 millas. De hecho el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, negó que exista alguna posibilidad de que el vecino del sur cargue con el costo.
Hay que recordar que el 62 % de los estadounidenses están en contra del muro fronterizo, según una investigación del Centro de Estudios Pew, y a pesar de todo el ruido que provocó Trump, 70 % estaba seguro de que Estados Unidos y no México, terminaría pagando el monumento de la vergüenza.
El presupuesto considera además los gastos para contratar a miles de nuevos agentes para el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE por sus siglas en inglés), y la Patrulla Fronteriza, además de 75 nuevos jueces de inmigración, 60 fiscales y 40 alguaciles.
El hoyo que provoca Trump en el presupuesto afectará especialmente a estados como Texas, que se decantaron por el republicano en las elecciones de noviembre.
Con eliminación de iniciativas como el Programa de Subvenciones en Bloque para el Desarrollo Comunitario, se recortarían cerca de 200,000 empleos de la burocracia. Aunque por otro lado, emplearían a más personas en el sector militar.
Se espera una agria batalla en el Congreso por este presupuesto. De hecho, el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, advirtió a sus contrapartes republicanas de un probable cierre del gobierno si Trump insistía en hacer pagar a los norteamericanos por su “capricho” en la frontera.
Descripción gráfica de los seguidores de Trump en estos momentos:
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