Marte y los mexicanos tienen una atracción más fuerte que la gravitacional.
Por: Omar Porcayo
Estudiantes y académicos mexicanos se han involucrado en diferentes proyectos que tienen como propósito la conquista del Planeta Rojo, pero hay uno que está directamente inmerso en la búsqueda de vida marciana desde hace años.
El doctor Rafael Navarro González es el único investigador de México que participa en la misión Exo Mars de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés). El programa busca resolver si el vecino de la Tierra fue habitado o puede ser colonizado en un futuro.
Especialista del Instituto de Investigaciones Nucleares de la Universidad Nacional Autónoma de México, Navarro González participará en la misión HABIT, que está programada para ser lanzada en 2020.
HABIT es un dispositivo que tardará nueve meses en llegar a Marte para estudiar su atmósfera y capturar la humedad del aire, para convertirla en agua para el consumo humano.
El Dr. Navarro tiene inquietud por la posibilidad de vida fuera del planeta desde muy joven. Presenciar la llegada del hombre a la Luna desató aún más su apetito por la investigación, que con el paso de los años lo llevó al proyecto Curiosity de la NASA.
Desde 2002 el mexicano ha participado activamente en la exploración de la superficie marciana.
“Recibí una invitación de un grupo de la NASA, para que hiciéramos una propuesta, de construir un laboratorio químico, móvil, que pudiera ser integrado en ese robot (Curiosity)”, dijo el académico a El Universal.
“Quedamos seleccionados y empezamos el proyecto: el diseño y construcción, pruebas y ensamblaje de este instrumento… llegó a Marte en agosto de 2012 y desde esa fecha hemos estado investigando su superficie”, explicó.
El éxito de Curiosity y sus hallazgos han permitido que la NASA haya extendido el tiempo de la misión dos veces. El laboratorio con el que colaboró el mexicano, ha arrojado datos trascendentales que permiten entender un poco más al planeta.
La especialización de Navarro ha llegado hasta la investigación de sembrado de papas en Marte, para la alimentación de sus colonizadores.
Aquí en la Tierra, también se están realizando estudios con simulaciones de Marte y otro mexicano ha estado involucrado. Yair Israel Piña López de 20 años fue seleccionado por The Mars Society, para integrarse a la misión en el desierto Hanksville de Utah, donde se encuentra la Estación de Investigación del Desierto en Marte (MDRS por sus siglas en inglés), que realiza experimentos para replicar las condiciones que encontrarán los astronautas en próximas misiones al Planeta Rojo.
Un equipo de la UNAM ganó en octubre un concurso por el desarrollo de un robot con la capacidad de explorar el territorio marciano.
Todos estos estudios son trascendentales, ya que la NASA tiene proyectada una misión tripulada a Marte para el año 2030. Cada una de las aportaciones de los involucrados, son pequeños pasos en el lago camino de 140 millones de millas hasta Marte.
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